Un grupo de investigadores de la Universidad de Bristol reconstruyó el cerebro de un dinosaurio utilizando tecnología 3D. Esto hizo posible determinar el modo de vida de la especie y conocer su dieta básica.
La reconstrucción del cerebro del Thecodontosaurus, mejor conocido como el dinosaurio de Bristol, significa un gran avance para la Biología, y otras ciencias.
Antonio Ballell, principal autor del trabajo, señaló que este nuevo análisis cerebral descubrió “muchas características fascinantes sobre esta especie”, siendo algunas de ellas “bastante sorprendentes”.
“Mientras sus parientes se movían pesadamente en cuatro patas, el dinosaurio de Bristol lo habría hecho sobre dos”, señaló.
“Nuestro análisis mostró que las partes del cerebro asociadas con mantener la cabeza estable y los ojos y la mirada activa durante el movimiento estaban bien desarrolladas. Esto significaría que el Thecodontosaurus podía atrapar presas ocasionalmente pese a que la morfología de sus dientes sugiriera que las plantas eran el componente principal de su dieta”, explicaron en la investigación.
Londres
Agencias