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San Judas Tadeo, el patrono de las causas difíciles, tuvo muchísimo trabajo este año, pues cientos de devotos del santo acudieron a agradecerle y sobre todo a pedirle salud, que se acabe el Covid y que los ayude a encontrar trabajo.
El 28 de octubre es una fecha muy importante en la región del Istmo de Tehuantepec, porque son miles de personas los que festejan a este santo en su día, en especial en este 2020, donde familias enteras le entregaron sus plegarias.
UN SANTO MILAGROSO
Y es que San Juditas es uno de los principales intercesores ante Dios, por todas las peticiones de la gente, cuando los devotos reciben la ayuda divina y se les cumple el milagro, no dudan en agradecerle a Dios y su santo por haberlos escuchado.
Y en la catedral de San José hay muchas historias de la ayuda que ha brindado.
‘SAN JUDAS CUIDÓ A MIS HIJOS’
Doña Marina cierra los ojos frente a la enorme imagen de San Judas Tadeo que se encuentra en el atrio de la Catedral San José, le pide que se termine la pandemia, que no haya más enfermos de virus Covid 19 y que sus hijos puedan regresar con bien.
Y es que sus dos hijos, así como su nuera, son empleados del hospital regional Valentín Gómez Farías, ellos son profesionales de la salud, y todos los días ponen su vida en riesgo para salvar las vidas de los pacientes.
En entrevista, explica que sus dos hijos, enfermaron de Covid mientras estuvieron prestando sus servicios, por lo que pidió a San Judas que los dos se curaran, para que pudieran ayudar a más personas.
Llora doña Marina, mientras platica acerca de todo lo que ha vivido su familia, pero llora más cuando ve que hay muchísima gente que no se cuida en la calle y que en cualquier momento se puede enfermar y contagiar a sus hijos cuando acudan a los servicios médicos.
FORTALEZA PARA EL PERSONAL MÉDICO
“Le vine a dar las Gracias, por lo que hemos vivido como familia en esta pandemia, porque yo tengo a mis hijos luchando, trabajando en el hospital, se enfermaron de Covid, pero se volvieron a levantar y siguen trabajando ahí, a mi nuera igual, le he pedido a San Judas su intervención ante la santísima trinidad para que les de fuerza, fortaleza y valor en estos momentos difíciles.
La señora comenta que, si Dios hizo que sus hijos sean profesionales de la salud para cuidar el bienestar de la gente, ella gustosa da todas las facilidades para que los profesionistas cumplan con su mandato divino.
NO HAY QUE BAJAR LA GUARDIA
La señora reconoce que en estos momentos en todos los hospitales públicos del país, hay muchas necesidades, por lo que es mejor que la gente se proteja, para que no lleguen a necesitar una camilla, o medicinas que no hay.
“Que las personas tengan más cuidado, que piensen en los médicos y enfermeras que dobletean y hacen triple turnos. Mis dos hijos y mi nuera trabajan día y noche, no hay personal, tenemos que ver la manera de cómo conseguirle por nuestra cuenta los instrumentos que necesitan” narra la señora.
Doña Marina termina de agradecer y suplicarle por ayuda a San Judas y se retira, se tuvo que llevar las dos veladoras que trajo consigo para dejárselas al santo, porque prohibieron que dejaran flores y velas al santito. Ahora comenta que se las colocará en un altar en su casa.
‘SAN JUDAS ME AYUDÓ CON EL COVID’
Ahí mismo en la iglesia, está doña Isabel, otra ferviente devota de San Judas, ella le agradece que la haya ayudado a superar el covid, porque pensó que se iba a morir en este año, porque no podía respirar.
Sin embargo, con mucha oración y devoción a San Judas, el santo patrono, le ayudó a que sus plegarias fueran escuchadas por Dios, y así logró salir adelante y superar la dura batalla contra el virus.
“Tengo muchos años, desde niña iba a misa en Orizaba a ver a San Juditas, porque no solo es el patrono de las causas difíciles, sino desesperadas, hace poco me enfermé de Covid, como dos meses y le pedí que me sanara, y me hizo el milagro”.
La señora expresa que todos los días agradece y le brinda una oración a San Judas, pero en esta fecha que es su día, lo hace con más gusto y le pide su intercesión con Dios en favor de todos los enfermos que no tienen recursos para enfrentar el padecimiento.
“Cuando me enfermé se siente la muerte, y a nadie se le desea y más que nada porque la vida que tenemos que es prestada y corta, en ese momento la valora uno y a la familia. Le pedía a San Judas mi sanación y al mundo entero lo ayude, en especial a la gente de escasos recursos que padece la enfermedad, que los ayude con sus alimentos, porque la enfermedad es muy costosa”.
‘SAN JUDAS ME AYUDÓ A ENCONTRAR CHAMBA’
Don Vicente, es un hombre originario de Coatzacoalcos que en varias ocasiones se ha quedado sin trabajo y siempre pide ayuda a San Judas para obtener empleo, por lo que siempre ha conseguido que lo apoye.
En este año, por fortuna él cuenta con una fuente de trabajo, pero sabe que mucha gente ha perdido la chamba, y por ello suplica a su santo patrono, que los ayude y puedan encontrar empleo pronto.
“Ofrendamos todo nuestro respeto a San Judas Tadeo, porque es un gran intercesor de las causas nobles de nuestra población, concede mucha ayuda cuando se le piden favores en materia de trabajo, en este su día se le agradece todo lo que hace por nosotros. Yo le he pedido trabajo y me ha dado trabajo. Le he pedido amor y me ha dado amor para compartirlo con mi familia, con mis semejantes”.
Y como ellos cientos de personas en Coatzacoalcos acudieron a la catedral san José y varios templos de la región a agradecer a San Judas Tadeo por toda la ayuda que han recibido y solicitarle su intercesión ante Dios para que los siga ayudando en este año tan difícil.
Coatzacoalcos
Sendic Aguirre
