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La industria de autopartes mexicana apuesta a ganarle a Alemania como proveedor del sector automotriz, y con ello, convertirse en el cuarto productor mundial, al alcanzar hacia 2023 una producción superior a los 102 mil millones de dólares y una inversión extranjera directa de hasta 8 mil millones de dólares en ese periodo, anticipó Alberto Bustamante, director de Comercio Exterior y Normalización de la Industria Nacional de Autopartes (INA).
En conferencia de prensa, Alberto Bustamante expuso que la inversión extranjera directa que recibe la industria de autopartes en México alcanzó en el primer trimestre de este año 662 millones de dólares, hacia 2023 estima que la inversión acumulada en este periodo sea de entre 5 mil y 8 mil millones de dólares.
Existen cuatro factores que impulsarán a la producción de autopartes en México hacia 2023: el cumplimiento de las reglas de origen del Tratado México, Estados Unidos Canadá (T-MEC), los tratados comerciales con EU, la guerra comercial de este país con China y la reposición de stocks de automóviles tras la pandemia de covid 19. México se mantiene como el principal proveedor de autopartes para los autos fabricados en Estados Unidos, se estima que cada auto que se fabrica en ese país tiene en promedio un contenido de 5 mil 500 dólares en autopartes mexicanas, lo que lo hace competitivo a nivel mundial, comentó el directivo de INA.
En el primer trimestre del 2021, la industria de autopartes de México se consolidó como el principal proveedor de partes y componentes de vehículos de Estados Unidos, participa con el 51.2 por ciento del total de importaciones que realiza ese país de autopartes y logró crecer 0.29 puntos porcentuales en la participación de mercado respecto al volumen del año previo. Con el incremento del valor de contenido regional, previsto en el T-MEC, el directivo de INA comentó que sin lugar a dudas México se consolidará como el principal proveedor en los siguientes años.
El segundo componente que impulsará al sector son los tratados comerciales que negocia Estados Unidos con Japón y la Unión Europea, como ejemplo del beneficio, expuso que actualmente cada vehículo que exporta Estados Unidos Unidos a Europa debe de pagar un arancel de 10 por ciento, con un tratado de libre comercio se quitaría esta imposición y la industria de autopartes mexicana se vería favorecida.
La tercera oportunidad es la guerra comercial que actualmente Estados Unidos tiene contra China, la cual comenzó con la administración del ex presidente Donal Trump, esta guerra impide que autopartes chinas para puedan entrar a Estados Unidos, y por ende la única opción que tiene es México. Si China quiere enviar autopartes a ese mercado se podría instalar en México.
El cuarto componente de este crecimiento es la recuperación del stock de autos y autopartes que se vieron afectados por la pandemia de covid-19, “veremos en los siguientes años un crecimiento muy significativo para el sector de autopartes”, se tiene un pronóstico anual de venta de autos en Estados Unidos de 17.2 millones de unidades de venta en ese país.
Agencias/CDMX
