El elemento de seguridad mantuvo encendida la veladora.

Bar Caballo Blanco, a 4 años de la barbarie

Se cumplió un aniversario luctuoso más del fallecimiento de las 32 personas.

Solo una persona llegó con ofrenda al lugar donde se registró uno de los episodios más violentos que se recuerden en Coatzacoalcos.

Este fin de semana se cumplieron 4 años de uno de los episodios más negros en la historia violenta de Coatzacoalcos: la masacre del bar Caballo Blanco y solamente un familiar acudió a las instalaciones a depositar una ofrenda.

El 27 de agosto del 2019 fue una de las fechas que marcaron para siempre la historia roja de Coatzacoalcos, por la cantidad de personas que murieron en el atentado que se perpetró en el bar.

En la noche, llegaron al bar personas desconocidas a vaciar galones de gasolina en el interior del local, cerraron los accesos para evitar que pudieran salir y encendieron fuego al lugar, de acuerdo a los testimonios que se han recapitulando por parte de los testigos del caso.

Apenas hace unas semanas fue vinculado a proceso Luis N, alias Don Gato, por su participación en la masacre mediante los cargos de homicidio culposo y homicidio en grado de tentativa por la muerte de más de 30 personas esa noche.

El domingo se cumplió un aniversario luctuoso más del fallecimiento de las 32 personas mexicanas y extranjeras que murieron en esa fatídica noche.

Muchos de las familiares que le sobrevivieron a las víctimas acordaron que este día en que se cumplen 4 años, no irían al bar, como había ocurrido en los dos años anteriores y que desde su casa les harían oraciones y darían su ofrenda.

Sin embargo, por la mañana, llegó una de las familiares a colocar unas flores en las afueras del bar, le pidió permiso a los policías municipales que resguardan el lugar desde finales de agosto del 2019.

Ahí mismo les pidió a los elementos de la Policía Municipal de Coatzacoalcos que en caso de que el viento apagara la veladora que le colocó junto al acceso principal de las instalaciones donde falleció su familiar, la pudiera mantener encendida. Uno de los elementos revisaba cada media hora la veladora.

Hoy muchos son los niños y menores de edad que se quedaron en la orfandad porque sus mamás y papás murieron en esa noche. Sus familias obtienen un recurso de apenas 5 mil pesos mensuales que les entrega la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, se trata de un apoyo que en estas fechas del año con el regreso a clases se disuelve en apenas unos días.

COATZACOALCOS

SENDIC AGUIRRE

 

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