1 PEDRO 5:7

Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar.

¡VELAR Y ORAR!
La oración y el pecado no pueden vivir en el mismo corazón, o la oración consumirá al pecado o el pecado ahogará la oración.
Una vida practicando pecado, es una vida
donde no estas siendo obediente a Dios.
Es decir, estas durmiendo no estas alerta, así
“ores” y sigas practicando el pecado, no servirán las oraciones porque ciertamente Dios no escucha a los pecadores.

Juan 9:31
Y sabemos que DIOS no oye a los pecadores; pero si alguno es temeroso de Dios, y hace su voluntad, a ése oye.
Y el dejar de pecar en esta tierra si se puede cuando eres completamente espiritual.
pues el dejar de pecar es progresivo y paso a paso, siendo constantes para no apartarnos.
Pero Dios es paciente para eso: Él espera a que vayas madurando, perseverando y así llegues a la meta.
Esto es obra del Espíritu Santo, Él te redarguye para arrepentirte pues el arrepentimiento te lleva a reconocer que pecaste.
Te lleva a dolerte de tal pecado, apartarte de eso y vivir en obediencia, esforzándote cada día.
Pero si acostumbras a pecar, tú ya no estas siendo redargüido.
Deberías de preocuparte porque podría ser tarde para ti, debes de tomar una decisión de ya no pecar.
Si eres hijo de Dios ya no eres esclavo del pecado, y mantienes una obediencia a la palabra de Dios.
Bendiciones, nos leemos la próxima semana.

Con amor Pastora Lupita Ruiz Sibaja.
Iglesia Tabernáculo de Dios.

En estos tiempos difíciles donde debemos congregarnos personalmente con todas las medidas sanitarias adecuadas, te invito a que nos acompañes en 2° Callejón de la báscula No. 10, colonia Esfuerzo de los Hermanos del Trabajo todos los domingos a las 11 am.

Busca a Dios con humildad de corazón.
Dios está donde su nombre es invocado.

Página de Facebook: Lupita Sibaja
Consejería al celular 921-239-11-22.
Bendiciones abundantes.