LUIS VELAZQUEZ

Pelea en la Iglesia/Cardenales con guantes/En picada los católicos



ESCALERAS: Hay un pleito entre Cardenales de la iglesia católica, apostólica y romana. Desde hace rato, siguen trepados en el ring Carlos Aguiar, nombrado por el Papa Francisco, y Norberto Rivera, enfermo, por cierto, del COVID.
Las diferencias llevadas al extremo:
Norberto Rivera, de 78 años de edad, está hospitalizado, y Carlos Aguiar se niega a cubrir honorarios, porque Norberto quiso en hospital de lujo. (Bernardo Barranco, Proceso 2309)
Además, de que Rivera arrastra una gigantesca mancha negra que ni siquiera ha podido ocultar su apego a los bienes materiales.
Y en contraparte, “el censo del año 2020 exhibe una caída vertiginosa de católicos, evidenciando una Iglesia decaída, sin oferta atrayente para los mexicanos del siglo XXI”.

PASAMANOS: Publicó Bernardo Barranco en La Jornada del día 3 de febrero: “En 1895, 99.1 por ciento de la población se decía católico.
En 1980, cayó al 93 por ciento.
Para 1990, descendió al 89.7 por ciento.
En el año 2010, llegó al 82. por ciento.
En 2020, 77.7 por ciento” de la población nacional.
De hecho y derecho, el rating de la iglesia va en caída al mismo tiempo que el PRI, en el año 2018, en el tercer lugar nacional de las urnas con José Antonio Meade como candidato presidencial, tiempo para cuando perdió tres candidaturas a la silla embrujada del Palacio Nacional.

CORREDORES: Varias razones para la caída estrepitosa de feligrés en la religión católica, entre otras, las siguientes:
Una, la vertiginosa fama de la pedofilia. El caso más famoso del curita Marcial Maciel. La iglesia, pagando millones de dólares y euros a las víctimas en muchas regiones del mundo para comprar y acallar conciencias y evitar más escándalos.


Dos, la fama pública de los escándalos en el Vaticano por el billete.

Tres, la sórdida lucha por el poder eclesiástico entre las tribus. Caso Carlos Aguiar y Norberto Rivera.

Cuatro, la ostentosa vida de muchos Cardenales, Arzobispos, Obispos, presbíteros y sacerdotes.

Cinco, la oposición sistemática al aborto, en todos los casos, en nombre de Dios.

Seis, el activismo de las otra religiones que les ha permitido ganar terreno. Por ejemplo, los evangélicos predicando la buena nueva de casa en casa cada ocho días, el sábado.

Siete, López Obrador, el presidente de la república, cristiano, abriendo las puertas del Palacio Federal a los pastores. Incluso, a cargo de la distribución de la Cartilla Moral de don Alfonso Reyes en el país para crear y recrear la purificación moral y la honestidad valiente.

Ocho. La fractura de las tribus eclesiástica sobre la comunidad gay. ¿Quién soy yo para juzgarlos? se ha pregunta el Papa Francisco.



BALCONES: En el siglo pasado, en los medios existían tres muros de Berlín intocables. Uno, el Ejército. Dos, el presidente de la república. Y tres, la Virgencita de Guadalupe.
Entonces, el Abad de la Basílica, Guilllermo Schulemberg declaró a la prensa que la Virgencita y el indito Juan Diego era un invento y que lo despiden y exilian.
Desde entonces, el Ejército, el presidente ni los ministros de Dios conservan el velo sagrado de la impunidad.
El resultado es uno solo:
El PRI, en abierta y estrepitosa caída.
Y la religión católica, cada vez perdiendo más feligreses.
La estadística del escritor y articulista, Bernardo Barranco, especialista en la materia, resulta impresionante.
Otras religiones son emergentes. Les están ganando terreno y pisando la sombra.
Nadie pensaría, claro, que Jesucristo pasaría de moda en un país que, con todo, sigue profesando la religión católica.

Barandal
Luis Velázquez

TE PUEDE INTERESAR

Hilvanando

  DALYX RAUS   MODA MASCULINA El Arte de Combinar Cinturón y Zapatos en el …