Matías, el niño emprendedor

Poder comprar una chamarra de más de 800 pesos para este nuevo regreso a clases, es lo que motivó a Matías Argumedo Rivera de 11 años a salir a vender bolis frente a su casa en la colonia Vistalmar.
Su madre, Jessica Argumedo Rivera, narró que el emprendedurismo de Matías comenzó hace muchos años, por su gusto de cocinar, tanto así que ha tomado cursos de repostería para poder seguir creando alimentos y tener sus propios ingresos.

-¿Cómo es que comienza esto de salir a vender bolis?-
“Bueno, él desde más pequeño siempre le ha gustado lo que es la cocina, principalmente la repostería y cuando se quiere comprar algo, nos pide ayuda para vender y poderse comprar sus cosas.
“Ahorita ya tenía material y como él piensa que va a regresar a clases, comenzó a buscar cosas que le gustaron para la escuela y fue que me dijo que iba a vender.
“El domingo en la mañana me dijo y ese mismo día en la noche ya estaba haciendo las cosas y el lunes inició la venta.

-¿Qué otras cosas ha vendido?-
“Además de bolis, vendió aguas aquí en este mismo lugar; pay’s, de hecho hace pedidos. Siempre es repostería, así como las aguas de sabores de frutas naturales”.

-¿Los vende entre vecinos o ya tiene sus clientes?-
“Entre vecinos, amigos, pues las redes sociales ahorita como que nos ayuda un poquito más, entre amigos y esta es su zona donde desde pequeño vende porque está frente a la casa y pues están los vecinos que lo cuidan, principalmente aquí se pone a vender”.

-¿Y qué dice la familia o en este caso como mamá?-
“Al principio yo creo que los niños en algún momento de su niñez siempre dicen: Mamá quiero vender tal cosa, pero bueno él continuó y continuó”.

-¿Qué representa para usted, el que a pesar de su edad él siempre quiera estar apoyando?-
“Pues la verdad estoy orgullosa de él, que ha sido muy independiente y pues siempre apoyarlo en lo que él quiera ser, y pues a veces sí se pone triste de que a veces no vende, entonces estarlo apoyándolo, sobre todo de que tenga esa actitud de querer hacer algo que uno como madre pues esta súper bien y súper feliz por él”.

-¿Matías, dice tu mami que siempre te ha gustado la vendimia?-
“Sí, empecé primero con las aguas, que fue en una esquina y después me vine aquí, primero empecé con las aguas, estuve con una amigo, pero ya después como no vendíamos y así nos dejamos de reunir para vender y después, como un par de años, empecé con los de los pay’s, después con un par de años lo dejé y también tomé dos cursos, uno de repostería y uno de comida”.

-¿El dinero en qué lo ocupas?-
“Quería para una chamarra para la escuela porque ahí hace mucho frío, y las maestras nos dicen si tienen demasiado frío traigan sus chamarras, vi la chamarra en Internet y me gustó que era como de la galaxia, primero quería empezar a vender paletas, pero después como vi que tenía material para hacer los bolis, empecé con ellos, me ayudó una tía”.

-¿Cuánto necesitas para la chamarra, cuánto cuesta?-
“En realidad ya la compramos porque era una oferta de 849, y un tío nos prestó el dinero para comprarla y lo que sale del bolis se lo estoy pagando”.

-¿Qué mensaje le mandas a los niños en casa que tienen pena de vender o que se la pasan en los celulares y tabletas?-
“Que aprovechen el tiempo que tienen para hacer algo nuevo, algo que les guste o perfeccionarlo, si les gusta el inglés, u otro idioma o hacer comida o cualquier cosa y así tienen su propio dinero y apoyan a sus papás”.

Coatzacoalcos
Elizabeth Aviña