Los independientes/ 32 para alcaldes/ Lucha cuesta arriba

ESCALERAS: Treinta y dos ciudadanos de Veracruz se registraron el OPLE como candidatos independientes a las presidencias municipales. 4, únicamente, para diputados locales.

Para la alcaldía de Xalapa, siete en total, entre ellos, el doctor en Economía, Raúl Arias Lovillo, el exrector más respetado y respetable, con una gran autoridad moral.

Ya se verá el resultado electoral. Hoy, sin embargo, ninguno de los 212 alcaldes es independientes ni tampoco los 50 diputados locales.

Sabrá el chamán de los Llanos de Sotavento si Veracruz está listo para hacer triunfar en las urnas a un candidato independiente o ciudadano.

PASAMANOS: En el otro lado de la cancha hay doce partidos políticos en la contienda. Ocho que existían, más cuatro aprobados por el OPLE, Organismo Público Local Electoral, cada uno soñando, mínimo, con mantener el registro para usufructuar las prerrogativas.

Y si es cierto, como decía Giovanni Sartoris, que en política gana el candidato y el partido que tenga más dinero, entre otras cositas, para comprar votos como se estila, entonces, el camino de los independientes está lleno de espinas y cardos.

CORREDORES: Un día, Jimmy Carter, gobernador de Georgia, soñó con la candidatura presidencial en Estados Unidos.

Desconocido que era en un país con cincuenta entidades federativas, se plantó en una esquina de Washington y se presentaba a los ciudadanos de a pie de la siguiente manera: “Soy Jimmy Carter. Soy cacahuatero. Y quiero ser presidente de Estados Unidos”.

Y lo fue.

Trabajador metalúrgico en un puerto de Brasil, Luiz Inácio Lula de Silva, alcanzó la presidencia de la república en el cuarto intento, gran líder obrero que era.

Los 36 ciudadanos registrados como candidatos independientes en Veracruz mucho habrán de luchar para abrirse paso.

BALCONES: Todos ellos son ciudadanos muy valientes aspirando a las alcaldías, pero más aún, a que el resto de la población electoral los mire y considere y se exprese en las urnas tachando su nombre.

Sueñan con la presidencia municipal en Córdoba, Coatzacoalcos, Veracruz, Jalacingo, Jalapa, Poza Rica, Chocamán, Pánuco, Isla, Tuxpan, Huatusco, Tehuipango, Paso de Ovejas, La Antigua, Coatepec, Ixtaczoquitlán, Coatzintla, Alvarado y Naolinco.

Unos observadores, politólogos del barrio y del café, advierten que Veracruz todavía no está preparado para candidatos independientes.

Quizá. Lo mismo, sin embargo, se afirmaba en Nuevo León y de pronto, “El bronco” ganó la gubernatura como candidato independiente y que se soñó candidato presidencial, pero la posibilidad nunca alcanzó.

PASILLOS: Y es que una cosita son los sueños legítimos, y otra, mil años luz de distancia, la realidad.

Por ejemplo: si un ciudadano se lanza como independiente significa, de entrada, que tiene un gran trabajo social en la comunidad, en el pueblo, en la región, en el distrito, para trascender.

Y con su trabajo social, entonces, es conocido, respetado y admirado, lo suficiente para ganar en las urnas.

Pero más todavía, para competir con los partidos políticos y sus candidatos.

Y competir, más aún, con el billete de las prerrogativas y el billete extra circulando en las cañerías.

VENTANAS: En tiempo de pandemia, las campañas se centrarán en las redes sociales, las plataformas tecnológicas, los whatsapp, los tuiters, etcétera.

Y todo cuesta. Y aun cuando la ley establece un tope, la realidad es que todos lo burlan, la mayoría, con inteligencia creativa para ser y estar.

Lanzarse como candidato independiente implicaría que hay billete de por medio para enfrentar hasta los gastos imprevistos como, por ejemplo, el ejército de operadores y cabilderos políticos el día de la elección.

Barandal

Luis Velázquez