Indigente perdió la vida por el maldito alcohol

Un indigente perdió la vida frente al hospital IMSS-Bienestar Valentín Gómez Farías, en lo que parecía título de uno de los libros más conocidos del escritor colombiano, Gabriel García Márquez y es que todos parecían saber que era su último día de existencia.

Este deceso, parecía la “crónica de una muerte anunciada”, el pobre hombre desde dos días as antes comenzó a sentirse mal, todos lo podían ver, tanto los demás indigentes, como las personas que están a la espera de algún familiar en el área de urgencias en el hospital.

Homero, a quien llamaremos así para no lastimar su imagen, es una persona que no sabía controlar su forma de beber alcohol y todos veían como cada vez que tenía una ingesta de sobre manera, su cuerpo amanecía muy mal.

Apenas en las primeras horas del 31 de diciembre, todos los que estaban cerca del hospital, el pobre hombre vomitaba sangre a borbotones, y la manera en que trató de resolver la situación fue con más alcohol para que la resaca no llegara.

Así comenzó a tomar hasta que se quedó dormido y empezó a retorcerse, horas más tarde al tratar de despertarlo, se dieron cuenta sus compañeros de calle que estaba muy tieso, hablaron a los números de emergencia y fueron los policías estatales, quienes se percataron de que no tenía pulso.

Hablaron a una ambulancia para que determinaran su situación y se procediera a levantar el cuerpo. Mucha gente llegaba a ver como el pobre Homero estaba con el cuerpo descubierto y sin signos vitales.

COATZACOALCOS

SENDIC AGUIRRE