Hay muchas personas que todavía leen: Don Rodrigo

Don Rodrigo Aguirre Zamudio es uno de los pocos voceadores que buscan salvar este oficio en Coatzacoalcos.

Con 86 años de edad, y con más de 66 años siendo voceador, afirmó que hasta que Dios le dé vida seguirá vendiendo periódicos y revistas en su puesto de lámina, ya un tanto deteriorado, ubicado en la esquina de Pedro Moreno y Zaragoza.

“Ser voceador es una profesión linda, conocí tanta gente que me ayuda, hay un roce social, los clientes me dan una sonrisa, se las devuelvo y les doy las gracias, me regalan cosas; de este oficio saque para casarme, para pagarles los estudios a mis hijos que son profesionistas, compré terrenos y luego los vendí para pagar la graduación y tesis de mis hijos”, destacó.

Con una andadera o bastón es como Rodrigo se apoya para caminar, ya que el paso de los años le ha cobrado factura con el desgaste de sus rodillas, de ahí en fuera, goza de buena salud, no padece ninguna enfermedad crónica degenerativa.

Su día se trabajo inicia a las 5 de la mañana y cierra su estanquillo a la una de la tarde.

SUS INICIOS EN LA PRENSA
Es originario de El Jícaro, perteneciente a Tierra Blanca, pero desde pequeño emigró al puerto de Veracruz.

A los 19 años comenzó a trabajar en una agencia de publicidad de revistas y periódicos, era el encargado de despachar los periódicos nacionales como El Universal, Excelsior, El Dictamen, La Alarma, entre otros.

A los 22 años, fueron sus primeros inicios como voceador y llegó a, ser secretario general por la CTM, “era muy productivo, en un día ganaba 100 pesos en aquellos años”, recordó.

Ahora la venta de periódicos ha bajado con el avance de las redes sociales, sin embargo, apuntó, hay muchas personas que todavía leen.
Y de las ventas, comentó: “Si hay venta buena como ayer vendo cien pesos, un día malo 50 pesos y antes llegaba a vender 500 en un día, la gente adulta.

Este oficio le permitió conocer a muchos políticos como al exgobernador de Veracruz, Agustín Acosta Lagunes, Dante Delgado Rannauro, Carlos Vasconcelos, Edel Álvarez Peña y su esposa Amalia.

SU VIDA HA SIDO DIFÍCIL
Don Rodrigo relató que su vida ha sido complicada desde la infancia porque se crió sólo.

No tuvo la figura de sus padres, y a los 11 años se fue de su casa ya que no aguantó la vida en el campo, aunado a que su madre los maltrataba.

Se fue a vivir con una tía al puerto de Veracruz, y tampoco le fue bien, “no me pegaban pero si no aportaba dinero no me daban de comer, y eso te enseña”, dijo.

Solo tuvo un hermano de los mismos padres, y otros medios hermanos de papá y mamá.

No tiene estudios de ningún grado educativo, no sabe leer ni escribir, sólo firma sus documentos oficiales.

Más tarde, se casó en Veracruz con su primera esposa con quien procreó dos hijos, hoy tienen 62 y 63 años.

De ahí se volvió a casar en Coatzacoalcos, y tuvo dos más de 25 y 26 años.

Todos sus hijos viven en otros municipios de Veracruz y sólo con una tiene relación, sus dos parejas ya fallecieron.

“Mis hijos se alejaron de mi, yo ya estaba viviendo en Coatzacoalcos, hubieron problemas familiares”, sostuvo.

COATZACOALCOS
IRMA SANTANDER