Los fraudes corporativos de entre 500 mil y un millón de pesos crecieron de 13 a 19 % en los últimos cuatro años, de acuerdo con un estudio de KPMG sobre el impacto de los delitos financieros.
En 2016 sólo un 13 % de las compañías en México reportaron afectaciones o pérdidas económicas de hasta un millón de pesos por el delito de fraude, pero para 2020 el número aumentó 6 puntos porcentuales para ubicarse en 19 %.
Incluso, los fraudes de hasta un millón de pesos son los que más crecimiento han tenido desde 2008, mientras que los fraudes iguales o menores a 500 mil pesos disminuyeron.
En promedio, el quebranto de fraude para las compañías se ubica en un millón 400 mil pesos por evento, monto que representa uno por ciento del promedio total de ventas anuales, se destaca.
Otro 10 % de las compañías encuestadas para este año reportaron haber sufrido fraudes por más de 5 millones de pesos.
FRAUDE INTERNO, PRINCIPAL MODALIDAD
Durante la presentación del estudio, Shelley Hayes, socia líder de Forensic de KPMG en México y Centroamérica, resaltó que el fraude interno es la principal modalidad de este tipo de crimen financiero, alcanzando el 62% de los casos en 2020.
El fraude por malversación de efectivo, el tipo de fraude interno más presentado en las organizaciones, aumentó de 42 % en 2016 a 58% en 2020, y el robo de activos como inventarios creció de 29 a 42 %.
Otros fraudes internos como los conflictos de interés, sobre cuenta de gastos y falsificación de registros contables incrementaron a 39, 37 y 21%, respectivamente.
Las personas que ocupan puestos de gerencia y otros niveles medios han incrementado su participación en la comisión de fraudes con un 42 % en 2020, destacó la especialista.
“Hemos notado una alta incidencia, casi 60 % de los casos, los defraudadores están actuando en colusión con alguien más, interno, externo o una mezcla”, dijo.
México
Charlene Domínguez/Reforma