Alertan abuelitos sobre un par de estafadores

Graciela, es una señora de la tercera edad no puede creer que en sus propias narices, una mujer y un tipo se hallan llevado todo el dinero que tenían guardado.

Ella y su marido necesitan ese dinero porque tenían problemas con el suministro de energía y requerían la compra de varios metros de cable de cobre.

Además, su esposo acaba de atravesar por un problema de parálisis facial y de cuerpo, además de problemas cardiacos, por lo que requieren de su efectivo para medicamentos.

La señora explica que todo se presentó cuando una mujer y un hombre se acercaron en un automóvil Tsuru, con bastante antigüedad y les ofrecieron apoyo en la calle.

Primero, les dijeron que colaboraban con una iglesia para entregar ayudas como despensas y eso se haría en su hogar, por lo que de inmediato llegaron a su casa.

Ahí la mujer desconocida, ingresó como si se tratara de un familiar que puede pasar y llegar hasta la cocina, es decir con muchísima confianza.

Le pidió un vaso para entregarle un aceite bendito, ahí mismo le informó que tenía muchísima envidia de la gente, por lo que la ayudaría con esa situación.

La estafadora le pidió un billete, al momento que el esposo sacó su billetera, ella tomó todo el dinero y lo metió en un paliacate, por lo que le pidió más efectivo.

Le dijo que ella sabía que había más dinero en el hogar, porque detrás de ellos estaba la virgen de Guadalupe y que la familia decía mentiras en su presencia.

Hasta que vio que no podía conseguir un peso más, la mujer amarró los billetes en el paliacate con varios nudos y los tiró debajo de la cama, porque antes había preguntado que dónde era que descansaban.

Fue entonces que les dijo que con ese amarre, los billetes y la abundancia se multiplicaría en el hogar, y así sin mayor despedida se fueron del lugar.

A los pocos minutos la señora movió la cama, para buscar los billetes, movió las tablas, movió todo y no encontró absolutamente nada, ni dinero, ni paliacate, todo había sido un timo.

Es por ello, que la señora Gabriela, avisa en especial a quienes acuden por su pensión, que no caigan en estas artimañas porque perderán todo su dinero con los estafadores.

COATZACOALCOS
SENDIC AGUIRRE