Un presunto caso de tortura dentro del C4 de Cosoleacaque fue denunciado por un par de hermanos que consideran lo vivido como un intento de homicidio.
Se trata de un joven de 14 y uno de 22 años, quienes narraron en la página de Resistencia Civil Minatitlán, que el pasado viernes 17 de febrero salieron a comprar cena a bordo de una motocicleta y en la colonia Salinas de Gortari se les descompuso por lo que tuvieron que continuar su camino empujándola.
Minutos después apareció la patrulla con el número económico SP-3598 y los elementos a bordo les cerraron el paso y procedieron a una revisión de rutina que terminó en su detención sin motivo alguno.
El menor de 14 años explicó que dentro del C-4 él y su hermano fueron presuntamente torturados, les cubrieron la cabeza con una bolsa de nylon y los asfixiaban.
De igual manera los sumergían en un tambo con agua fría, aunado a los toques eléctricos, cuyas descargas las recibían en la zona de testículos.
También fueron “tableados” y posteriormente, tras no hallar delitos qué imputarles, fueron dejados en libertad, no sin antes cobrarles dos mil pesos de multa por “faltas administrativas”.
La madre de las víctimas dio a conocer que la noche que detuvieron a sus hijos, ella llegó a esas instalaciones en busca de información, y que en todo momento le negaron la presencia de sus consanguíneos.
Dentro del proceso al que describieron como un “infierno”, existió la amenaza de abuso sexual contra del menor, estudiante de secundaria, que respaldado por sus padres se presentó a denunciar lo ocurrido el fin de semana.
Entre lo que consideran es una injusticia y abuso, se agrega los 4 mil pesos que exigen en un encierro local para liberar la motocicleta que resultó ser legal y sin reporte alguno.
Por la tortura y la doble privación de la libertad se interpuso la queja en la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) junto a las denuncias formales en la Fiscalía.
COSOLEACAQUE
ELIZABETH AVIÑA