En el zoológico de Edimburgo los fuegos artificiales habrían provocado el fallecimiento de un bebé panda rojo, y es que es ruido provocado por estos dispositivos hicieron que el animalito se estresara tanto que se ahogó con su propio vómito, algo que confirmaron expertos de la Real Sociedad Zoológica de Escocia.
El bebé pandita, bautizado como Roxie, y quien se había ganado el cariño del público, murió con tan solo tres meses de edad, el pasado 5 de noviembre, luego de que se tuviera lugar la noche de las hogueras en el Reino Unido, una fecha en la que se lanzan juegos pirotécnicos para conmemorar el aniversario de un complot fallido para hacer estallar las Casas del Parlamento de Londres en 1605.
Para colmo de males, la mamá de Roxie, una panda llamada Ginger, murió días antes que su cría por lo que el bebé pandita había quedado desprotegido y al cuidado del personal del zoológico quienes lo alimentaban y daban cariño, por lo que el bebé estaba respondiendo bien, sin embargo, los fuegos pirotécnicos le provocaron una severa crisis nerviosa que acabó con su vida.
ESCOCIA
AGENCIAS